el comportamiento sexual y sus diferentes manifestaciones desde el punto de vista psicológico, fisiológico y social, teniendo en cuenta las dimensiones de Sexo (dotación genética y genital, y por tanto, física), de Sexualidad (cómo yo la vivo y cómo me oriento hacia otras personas sexualmente) y de Erótica (cómo yo me relaciono con los demás y cómo expreso mi sexualidad con comportamientos, hechos, gestos…).
La Terapia Sexual es un proceso terapéutico en el que se trabajan conocimientos y estrategias para aumentar la calidad de vida sexual de la persona o pareja que acude a consulta, sea porque desea mejorar esa área en sentido global o porque existe una problemática concreta, de causa no orgánica.
Disfunciones sexuales
Además de aspectos relacionados con la compatibilidad sexual con la pareja o con el deseo de aumentar la educación sexual o resolver dudas, algunas de las disfunciones que se trabajan en esta categoría son las siguientes:
- Aversión al sexo: rechazo persistente y repetido de cualquier tipo de relación o contacto sexual, de forma que genere malestar significativo a la persona que lo padece.
- Bajo deseo sexual: pérdida o disminución del deseo de mantener relaciones sexuales y/o fantasías eróticas, de forma mantenida en el tiempo.
- Dificultades en la excitación sexual: cualquier aspecto psicológico que disminuya las probabilidades de lograr excitarse durante las relaciones sexuales, sea con o sin compañía.
- Problemas de erección o Disfunción eréctil: dificultad para iniciar o mantener una erección sin que exista un problema médico que la cause.
- Dificultad para el control de la eyaculación o Eyaculación Precoz: falta de control sobre el reflejo eyaculatorio, que lleva a que este se produzca más pronto de lo deseado.
- Anorgasmia: dificultad para experimentar orgasmos de forma reiterada y mantenida en el tiempo.
- Eyaculación retardada: dificultad o incapacidad para lograr la eyaculación y, habitualmente, también el orgasmo.
- Vaginismo: imposibilidad de mantener relaciones sexuales con penetración debido a una contracción involuntaria de los músculos vaginales; puede producirse también al intentar introducir en la vagina otro elemento como, por ejemplo, un tampón.
- Dispareunia o dolor en el coito: dolor intenso y persistente al intentar realizar el coito, que puede deberse a múltiples causas psicológicas.
- Insensibilidad en las relaciones sexuales: ausencia de sensaciones placenteras durante las relaciones sexuales.
- Parafilias: patrones de comportamiento sexual en los que existe una excitación predominante por situaciones y/o objetos, más que por la relación sexual en sí misma.
- Problemas sexuales relacionados con enfermedades médicas: si la causa de la disfunción sexual es orgánica, el abordaje psicológico se centra en una mejor adaptación a dicha circunstancia, en un aumento de la educación sexual para poder gozar de una vida sexual más variada y en la puesta en marcha de estrategias terapéuticas que llevarán a una mejor calidad de vida sexual.
Para conocer más mi labor, puedes consultar los apartados Sobre mí y sobre los Tipos de terapia que realizo.
Hay personas que a veces no se sienten identificadas con ningún punto de la lista. Si ese es el caso, te recomiendo que igualmente me consultes sin compromiso porque es posible que pueda ayudarte igualmente, ya que la lista es solamente un resumen de lo que se puede abarcar en la terapia. Y si te has sentido identificado/a en alguna de las situaciones descritas, no dudes en contactar conmigo y solicitar información. ¡Vas a estar mejor!